Hace ocho años, El Celler del Nou Priorat abrió sus puertas en Barcelona con una visión clara: ofrecer una experiencia gastronómica que honre la tradición catalana y mediterránea, priorizando la sostenibilidad y el respeto por el entorno. Desde entonces, nos hemos consolidado como un referente en la filosofía slow food, apostando por ingredientes de proximidad y de temporada, y colaborando estrechamente con productores locales.
El movimiento slow food, nacido en Italia en 1986, promueve una alimentación buena, limpia y justa. En El Celler del Nou Priorat, esta filosofía se traduce en cada aspecto de nuestra cocina y servicio. Creemos en el poder de la comida hecha con tiempo y cuidado, donde cada plato es un homenaje a la cocina consciente y sostenible. Apostamos por una experiencia que va más allá del gusto: queremos conectar con el origen de los ingredientes, con la tierra y con quienes la trabajan.
Nuestro compromiso con la sostenibilidad va más allá de ofrecer platos exquisitos; buscamos crear una experiencia gastronómica consciente y respetuosa con el entorno. Trabajamos con ingredientes de Km 0, cultivados o elaborados cerca de nuestro restaurante, lo que garantiza no solo el mejor sabor, sino también un impacto positivo en el medio ambiente. Evitamos transportes innecesarios, minimizamos el uso de plásticos y apostamos por productores que practican la agricultura ecológica y regenerativa.
Nos sentimos orgullosos de colaborar con productores locales, artesanos apasionados que aportan autenticidad y frescura a cada bocado. Esta relación directa nos permite conocer el origen de cada ingrediente y asegurar su calidad, fortaleciendo la economía local y preservando las tradiciones culinarias de nuestra región. En El Celler, sabemos que cada ingrediente tiene una historia, un territorio y un rostro, y trabajamos para honrarlos.
En El Celler del Nou Priorat, cada plato es una celebración de sabores que honran la tradición y celebran el presente. Nuestro menú se basa en productos de temporada, lo que nos permite ofrecer una carta dinámica y adaptada a los ciclos naturales. Además, contamos con una cuidada selección de vinos ecológicos y naturales, que complementan perfectamente nuestra propuesta culinaria.
Al adoptar la filosofía slow food, reducimos significativamente nuestra huella ecológica. Al consumir productos locales, evitamos el transporte de larga distancia y la contaminación asociada. Disminuimos el uso de envases y plásticos, al comprar directamente a los productores y usar ingredientes frescos. También contribuimos a la conservación de la biodiversidad local, al priorizar variedades autóctonas de frutas, verduras y animales criados en pequeñas granjas sostenibles.
La cocina de proximidad también tiene un impacto positivo a nivel social y económico. Al trabajar con pequeños productores, ayudamos a sostener su actividad y a mantener vivos los saberes tradicionales del territorio. Generamos empleo local, impulsamos el desarrollo de zonas rurales y creamos una red de confianza entre productor, cocinero y comensal. En definitiva, apostamos por una economía circular, humana y resiliente.
A lo largo de estos ocho años, hemos recibido el reconocimiento de nuestros clientes y de la comunidad gastronómica por nuestro compromiso con la filosofía slow food. Nos enorgullece formar parte de una red de restaurantes que comparten nuestros valores y trabajan por una alimentación más consciente y sostenible.
En este octavo aniversario, queremos agradecer a todos los que han sido parte de nuestro viaje. Los invitamos a celebrar con nosotros y a seguir disfrutando de una experiencia gastronómica que respeta el tiempo, la tradición y el entorno. Porque cocinar es un acto de amor, y comer, una forma de cuidar. Reserva tu mesa y acompáñanos en esta revolución deliciosa.
Lunes a Jueves: 20:00 a 24:00
Viernes y Sábado: 13:30 a 16:30 y 20:00 a 24:00
Domingo: 13:00 a 17:00